lunes, 6 de octubre de 2008

Yo no venía de ningún país, tú ibas camino de cualquier lugar. Conmigo no contaba el porvenir, de ti no se acordaba el verbo "amar". Yo no jugaba para no perder, tú hacías trampas para no ganar. Yo no rezaba para no creer, tú no besabas para no soñar.